Robin Wood
Caazapá (Paraguay), 1944.
Hijo de inmigrantes australianos, pero de ascendencia irlandesa. A los pocos años de vida se muda por poco tiempo a Argentina, pero regresar a Paraguay. Sus dos pasiones son el viajar y la lectura. Debido a su pobre situación económica se dedica a leer todo lo que cae en sus manos y viajar en cada una de esas historias. Desde jovencito trabaja en infinidad de actividades, todas muy distintas entre sí. Y aprovecha a visitar nuevos países cada vez que puede.
La embajada francesa en Paraguay ofrece un premio por un análisis de la cultura y el arte de Francia. Wood, de instrucción básica pero gran lector, gana el concurso. Esto le abre las puertas en el diario El Territorio que lo emplea como corresponsal en Buenos Aires. En Argentina intentará volverse dibujante. En el interín conocerá a Lucho Olivera que le pide que escriba algunos guiones. Los tres guiones que Wood escribe son presentados por Lucho Olivera en la editorial Columba y son aceptados. El joven Robin, al ver la importante suma que recibe por estas tres historias, decide dedicarse plenamente a la escritura de historietas.
Para dar cuenta de lo cuantioso de su trabajo podemos echarle un vistazo a su entrada en Wikipedia, allí dice que ha creado más de 95 personajes y 10.000 guiones de historietas realizadas, principalmente, para la editorial argentina Columba: Nippur, Dago, Dax, Pepe Sanchez, Ibañez, Dennis Martín, Jackaroe, Savarese, Mark, Big Norman, Or-Grund, Dax, Wolf, Morgan, El Cosaco, Aquí la Legión, Kozakovich & Connors, Mojado, Los amigos, Helena y más… lo hicieron durante varias décadas el guionista preferido por la mayoría de los argentinos.
Y cuando «el pulpo» no da abasto, la editorial toma a muchos de sus personajes y pasan a ser guionados por otros colegas, aunque la firma de Wood pocas veces desaparezca. Los lectores, simplemente, se abalanzaban sobre las historias de Robin Wood.
El éxito no lo detuvo, por el contrario, con tranquilidad económica Robin recorre el mundo. Se casa con la danesa Anne-Mette con quien tiene cuatro hijos y se radica en Dinamarca.
En los 80 crea la Editorial Wood en Europa, con la que edita la revista Mark 2000, donde publica sus ya conocidas creaciones.
En 1982 comienza a ser publicado en Italia por Eura Editoriale, en las revistas Skorpio y Lanciostory. Para ellos sigue creando personajes e historias hasta la actualidad: Drácula, Martin Hel, Danske, Starlight, Merlin, Amanda. Tal es el amor que los italianos tienen por Wood que su serie Helena es adaptada a la televisión local y Dago y Martin Hel son grandes éxitos en Italia y se publican en formato álbum.
Los premios que recibió Wood en su vida son incontables. Por mencionar solo unos pocos: el Yellow Kid en 1997 por su trayectoria, en 2000 recibe Gran Premio del Festival Internacional del Cómic de Lucca, por Dago «El Jenízaro Negro». En 2020 recibe el primer Premio Ricardo Barreiro (junto al español Enrique Sánchez Abuli) otorgado por ARGH! la Asociación Profesional de Guionistas de Cómic de España.
Actualmente, ciertos problemas de salud en los últimos tiempos lo tienen recluido en su Paraguay natal.